Ya sea para uso profesional como para emplearlos en tu home studio, necesitas unos auriculares con un sonido de alta fidelidad, lo más natural posible. Por ello buscas unos cascos con respuesta plana sin coloreado de tonos, en los que se puedan apreciar detalles que te permitan corregir posibles errores en la grabación del audio. Pero, ¿cuál es el mejor?
Eso dependerá de muchos factores pero, principalmente, del uso que les vas a dar. En este artículo analizo los 10 mejores modelos de auriculares de estudio que puedes encontrar ahora mismo en el mercado divididos en dos grupos: los 5 modelos más elegidos de auriculares cerrados para grabar y los 5 mejores auriculares abiertos para mezclas.
¿Qué verás a continuación?:
Los 5 Mejores Auriculares Cerrados para Grabar
5. AKG K52
Excelente cancelación de ruido pasiva.
Los K52 pertenecen a la gama básica económica de AKG, sin embargo, no se quedan atrás. Ofrecen una escena sonora amplia, con matices y separación de instrumentos. En su perfil de audio las frecuencias altas tienen cierto predominio, están muy marcadas, los medios se hacen notar pero no interfieren con los otros tonos y los bajos son correctos pero quedan ligeramente neutralizados.
Son auriculares circumaurales cerrados con estructura de metal y diadema flexible autoajustable. En general se ven muy bien construidos y, aunque el material de sus copas se nota fácilmente deteriorable cuenta con la ventaja de que las almohadillas se pueden cambiar con facilidad. Por otro lado, son livianos y muy cómodos, están pensados para trabajar con ellos puestos durante períodos largos.
Por su construcción aislan bastante el ruido exterior e impiden que el sonido se escape y pueda colarse en el micrófono. Son una muy buena opción para monitorizar audio, voz (radio o podcast, por ejemplo) e instrumentos musicales. Para escuchar música no son más adecuados. Si no tienes otros te pueden servir, pero notarás la falta de musicalidad en el audio.
Lo Que Me Gusta
Lo Que No Me Gusta
4. OneOdio FUSION A7
Conectividad mixta: cable y bluetooth.
La calidad de audio de estos auriculares es bastante aceptable teniendo en cuenta su precio. Crean una escena sonora que no es muy amplia pero tampoco excesivamente reducida, por lo que permiten apreciar la separación de instrumentos correctamente. Los altos son marcados sin llegar a ser sibilantes, los medios pierden detalle al utilizarlos con Bluetooth y los bajos son potentes y con buen punch.
En lo que respecta a su construcción, los materiales son de calidad media pero resistentes. Están fabricados en plástico y cuentan con un refuerzo de metal en la diadema que les da más robustez. Son circumaurales, por lo que aíslan bien y las almohadillas no presionan sobre la oreja. Y además hacen un arco amplio por lo que son aptos para todo tipo de tamaños y formas de cabeza.
Los recomendaría para un uso no profesional, en home studio, por ejemplo. Y, como usos alternativos que le dan más versatilidad, también es posible utilizarlos para escuchar música e incluso para mirar películas o series en la TV.
Lo Que Me Gusta
Lo Que No Me Gusta
3. Sony MDR-7506
Excelente apreciación de detalles.
El sonido que ofrecen estos auriculares es muy profesional teniendo en cuenta que su precio ni siquiera se acerca a los de los modelos de gama premium. Su perfil de sonido es plano. Permiten apreciar matices y detalles con claridad y no colorean ninguna frecuencia. Por otro lado, y algo que lo hace muy recomendado para grabar, es que aisla bien el sonido exterior y bloquea la salida del interior.
En cuanto al diseño, se comprende mejor si explico que estos auriculares fueron lanzados al mercado en el año 1991. Por eso no se asemeja en estética a otros modelos más actuales, pero si aún sigue siendo uno de los más elegidos es por su buena resistencia y durabilidad. La estructura de la diadema es de metal y las almohadillas tienen un acolchado fino pero muy cómodo.
Por su precio son una excelente opción para iniciarse en el mundo profesional o si buscas unos auriculares para home studio con cierta calidad sin excederte en el presupuesto. Funcionan muy bien tanto en grabación como en edición de audio y vídeo.
Lo Que Me Gusta
Lo Que No Me Gusta
2. Beyerdynamic DT770 PRO
250 ohmios de impedancia para una gran fidelidad de sonido.
Estos auriculares ofrecen un sonido muy contrastado y equilibrado. Tienen una respuesta de frecuencias muy amplia que abarca desde los 5 Hz hasta los 35000 hz lo que les permite reproducir sonidos y matices que con otros auriculares serían imperceptibles. Y, como están diseñados para uso en estudio, cuentan con una impedancia de 250 ohmios, lo que les da gran fidelidad.
Son de arquitectura cerrada y circumaurales, además de que sus copas son bastante voluminosas, por lo que aislan muy bien el ruido exterior, evitan que el sonido se escape y, a la vez, potencia las frecuencias bajas. Además, son bastante cómodos, dado que tienen un buen acolchado y las copas están recubiertas en tela aterciopelada.
Por sus características son unos auriculares con destacable rendimiento en producción, monitorización y grabación de voz. Dada su alta impedancia y la necesidad de emplear un amplificador para sacarles el máximo partido, no te los recomendaría para uso en móvil u ordenador portátil. Para ese fin puedes encontrar otros modelos mucho más adecuados.
Lo Que Me Gusta
Lo Que No Me Gusta
1. Shure SRH1540
Excelente rendimiento y calidad de alta gama.
Estos auriculares de gama premium brindan una escena sonora expandida y un perfil neutral. Ninguna frecuencia destaca por encima de las demás pero todas están muy bien conseguidas. Los bajos no son excesivamente potentes pero conservan su golpe y tanto medios como altos son claros, nítidos y con gran detalle. Cumplen a la perfección con su cometido.
Al analizar su construcción inmediatamente te impresiona su calidad de gama alta que se aprecia tanto en materiales como en diseño y acabados excelentes. Su estructura es de aleación de aluminio y fibra de carbono, las almohadillas son de espuma de viscoelástica y están forradas en tejido de alcántara. Son robustos, durables y cómodos. Están pensados para trabajar con confort.
Con todas estas características expuestas y teniendo en cuenta que su precio no está al alcance de cualquier bolsillo, está claro que son una inversión para un uso profesional. Su rendimiento es excelente. No obstante, también son una muy buena elección para audiófilos que buscan gran calidad y puedan permitirse unos auriculares de esta gama.
Lo Que Me Gusta
Lo Que No Me Gusta
Los 5 Mejores Auriculares Abiertos para Mezclar
5. Samson SR850
Bajos muy pronunciados.
El perfil de sonido de estos auriculares de diseño semi abierto se extiende bastante hacia los bajos. Quizás demasiado según el gusto personal de cada uno. Los agudos tienen también gran presencia, mientras que los medios pasan un poco desapercibidos. La escena sonora, por su parte, es bastante amplia.
Están construidos completamente en plástico y dan la impresión de ser algo frágiles. La diadema es autoajustable, las copas llevan una espuma bastante gruesa y están forradas en terciopelo, que es mucho más agradable al tacto, durable y da menos calor que la piel sintética.
Los recomendaría para quien necesite unos auriculares para mezclas y no quiera gastar más de 50 euros. Pero hay que tener en cuenta que en unos cascos de este precio es difícil encontrar más calidad en construcción y materiales.
Lo Que Me Gusta
Lo Que No Me Gusta
4. Beyerdynamic DT 990 PRO
Alta impedancia y amplio rango de frecuencias.
Los DT 990 Pro son auriculares de diseño abierto por lo que tienen un perfil de sonido espacioso, claro y bastante plano. Aunque hay que tener en cuenta que los bajos están algo pronunciados. Todas las frecuencias responden de manera muy fiel a la realidad y ofrecen el máximo detalle y esto es gracias a su rango de frecuencias de 5 Hz a 35000 Hz y a su alta impedancia de 250 ohmios.
Están correctamente construidos y gracias a su diseño circumaural y al gran volumen de sus copas, no generan presión. No obstante, dado su peso, después de llevarlos varias horas puestos empieza a sentirse algo de molestia por lo que es necesario quitárselos unos minutos y descansar. De todas maneras, son unos auriculares muy cómodos y no dan calor.
Están diseñados para su uso tanto en mezcla, como en edición o masterización y ofrecen unos magníficos resultados. Por su tipo de arquitectura no son recomendables para grabación y si quisieras usarlos como auriculares para oir musica simplemente tendrías que tener en cuenta que en equipos de baja potencia requieren del uso de un amplificador para ofrecer el mejor sonido.
Lo Que Me Gusta
Lo Que No Me Gusta
3. Philips Fidelio X2HR/00
Buenos bajos en diseño abierto.
Estos Philips Fidelio son unos auriculares de estudio de arquitectura abierta que destacan por tener unos bajos sublimes, profundos y limpios. Lo que es un buen acierto del modelo, teniendo en cuenta que los abiertos no suelen conseguir esta función. Los tonos medios, muchas veces relegados, aquí también están muy bien logrados y los agudos son buenos, pero se echa en falta en ellos más claridad.
A nivel de construcción también aprueban con notable. La estructura está reforzada en metal y los plásticos son de calidad premium, con una muy buena durabilidad. La diadema, forrada en piel, reposa suavemente y las copas con espuma de memoria de forma forradas en tejido aterciopelado acaban de aportar comodidad. Pueden llevarse puestos bastante tiempo sin que molesten.
Si buscas unos auriculares con buena respuesta en el rango de frecuencias bajas y prefieres que sean de diseño abierto, por un precio que aún no llega a los de gama alta, puedes tener unos estupendos auriculares para mezclas y masterización con calidad profesional. No te los recomiendo para escuchar música o mirar TV porque, dada su estructura, el sonido sale hacia afuera.
Lo Que Me Gusta
Lo Que No Me Gusta
2. Roland Rh-A30
Reproducción detallada y espaciosa.
Estos auriculares para estudio ofrecen una escena sonora bastante extendida gracias a su diseño abierto. Por otro lado, dado su amplio rango de respuesta de frecuencias, que abarca de 10 Hz a 25000 Hz consiguen reproducir todos los tonos con mucho detalle. Razones por las que son unos magníficos cascos para trabajar en monitorización.
Su construcción es de muy buena calidad. Son unos auriculares robustos y durables a la vez que ligeros y muy cómodos. Dado que las almohadillas están forradas en tela aterciopelada que es bastante transpirable y que el diseño abierto permite que el auricular se airee, resultan muy cómodos.
Aunque el fabricante los recomienda para ensayo e interpretación además de para mezcla y grabación, te recuerdo que los auriculares de tipo abierto así como dejan entrar ruido exterior, también permiten que el sonido se escape del auricular. Con esto te quiero decir que no los recomiendo para grabación ya que lo que suena en ellos puede llegar al micrófono.
Lo Que Me Gusta
Lo Que No Me Gusta
1. Sennheiser HD 660 S
Versatilidad en géneros musicales.
Sennheiser no suele decepcionar y con este modelo han vuelto a dar en el clavo. Con un rango de frecuencias que abarca desde los 10 Hz hasta los 41.000 Hz estos HD 660S logran reproducir con claridad, nitidez y bastante detalle tanto los tonos bajos como los medios y altos. Son unos auriculares muy versátiles que se adaptan a cualquier genero musical.
Están muy bien construidos. Probablemente no rebosan de detalles pero su diseño es sencillo y funcional. La diadema, a diferencia de las de otros modelos, tiene una generosa capa de espuma para amortiguar el apoyo y las almohadillas, también bastante gruesas, están forradas en tela aterciopelada, muy agradable al tacto y bastante transpirable. Son ideales para trabajar mezclando pistas.
Ofrecen muy buen rendimiento para su uso en estudio o en home studio. Son excelentes tanto en calidad de audio como en comodidad y durabilidad. Si puedes invertir en lo que cuestan estos auriculares, les sacarás bastante provecho y mejorarán notablemente tu experiencia.
Lo Que Me Gusta
Lo Que No Me Gusta